Teorías de antes de dormir

Zokah dice que no es que los bostezos se contagien, si no que lo que ocurre es un único bostezo condenado a vagar por el universo y que cuando nos roza nos hace bostezar, con un microsegundo de diferencia para salvaguardar esa distancia física entre persona y persona.
Yo le digo que lo mismo ocurre con la alegría, o con la felicidad, que tenemos suerte si al inclinarnos nos roza, y que no podríamos soportarlo si nos da de lleno porque nuestro cuerpo no está diseñado para albergar tantas endorfinas corriendo por nuestro torrente sanguíneo y haciéndole el amor a los glóbulos rojos.
Él dice que por esa regla de tres debería pasar lo mismo con la pena.
A mí me gusta más la teoría del mínimo común denominador.


Él bosteza, se da la vuelta y se duerme.
Yo sonrío.


Es curioso como la disparidad aburre a unos y estimula a otros tantos.

Secretary, assume the position


Fuego en el cuerpo




El amor no siempre es suave.


“Pudiendo elegir algo mejor, prefiere un trabajo sin responsabilidades donde podrá estar subordinada, limitarse a recibir órdenes y de esa forma sentirse protegida”

 
Es cierto que nuestro intelecto parece concentrar todas sus fuerzas, y las del “más allá”,  en desechar todo aquello que nos hace daño o que creemos ingenuamente que no nos conviene, pero, qué pasa cuando los sentimientos retan a la razón defendiendo y deseándonos eso que llamamos autodestrucción… ¿Deberíamos ingresar en un psiquiátrico y dejar que pensaran por nosotros o … para Gustos, Colores?

Y me tomo el lujo de aconsejar una película para todo aquel que aprecie tal tipo de atrevimiento.  Secretary de Steven Shainber.

<< Je mets tout mon plaisir à être triste >> (Stendhal)



Y sí que es cierto, que cuanto más nos “lo ponen a huevo”, cuanto más nos mantean el suelo para hacerlo menos duro a la caída, más sospechamos.
Igual es porque nos han educado en la mentira de que las relaciones compra- y- venta son necesarias pero no debe olvidarse nunca revisar el producto para que no nos den gato por liebre.
Yo recuero a mi madre diciéndome que no aceptara caramelos de extraños porque la gente no es siempre buena de corazón y en ocasiones esa dulce felicidad no enmascara más que un amargo deseo de beneficio personal.
Lo que no consigo recordar es la parte en la que me enseñó a diferenciar qué caramelos eran honrados y qué caramelos no.
 Que las personas se miden por sus actos, ya no sólo por sus palabras, pero, y qué hacemos con los baches, la inestabilidad y las “idas de olla” que caracterizan a nuestra especie animal…? ¿Deben perdonarse los caramelos emocionalmente fluctuantes?
¿Será que no somos capaces de darnos cuenta de que, a veces, sí hay alguien ahí de quien nos podemos fiar? ¿Será que hemos visto demasiada televisión? ¿Por qué siempre bajamos al sótano cuando sabemos de antemano que es ahí donde la película llega a su fin?
¿Provocamos nosotros mismos ese deseo de insatisfacción?


tú dices... yo imagino

Escucha



Que a mí lo que me gusta es provocarte, que me mires, no enseñarte nada y que me imagines.
Porque el fuego no se comparte sólo entre las sábanas, que las orgías que protagonizan nuestras neuronas pueden sacurdir los cuerpos más gélidos y hacer que se derritan a los placeres de la percepción.

y en la letania del mecer del sueño...


No se me ocurre nada mas allá q decirte q tus 26 hubieran sido míos si hubiera sido capaz de predecir tu llegada. Q hubieran sido tan solo míos, porque lo condensado en tres años de mundo que he recorrido a tu lado no son suficientes para entender q cada paso de tu mano cuenta y q adoro el momento en el q mis pies pisan los tuyos bailando la serenata q me cantas por las noxes cuando tus dedos enredan mis ideas y tu cariño provoca mi rabia porque llevo 23 años perdidos sin saber lo q me estaba dejando por las esquinas. Pero te aseguro q inventaré un mundo en el q llegues saltando y sean mis dedos los q acaricien tus rizos cantándote esa canción en la q te prometo cumplir aniversarios todos los días hasta inventar 26 colores nuevos q llenen tu vida de mí.

Te quiero

Esperpento



La verdad, creo q no tengo nada interesante q contar, más allá de la realidad paralela que me he esforzado por inventar.

Sé que no me pasa nada interesante porque todo eso se lo dejo a mi otro Yo. Mi Yo, el de verdad, mira con cara de asombro cada vez que alguien le nombra, o cada vez q alguien muestra un ligero atisbo de eso q llaman “oye, yo te conozco, no?”

Tengo mil historias, tengo mil cuentos, y mil espías secretos que sacuden tu mundo, ellos hacen que seas tú el q me sigas a mí, bueno no a mí, a mi otro Yo más bien, más que nada porque es mucho más interesante, más simpático y no se pasa las tardes frente a un ordenador inventando guiones que más tarde protagonizará...

Pero si yo invento su vida, será que quizás Yo mueva su mundo… sin mí no habría tierra q pisar. Decidme, entonces, por qué esa estúpida tendencia a infravalorarnos, es que no somos suficientes a los ojos de nuestra propia necesidad? Quién decide quién escribe y quién actúa? Quien? La sociedad? Cuántas sociedades existen si nosotros, los supuestos reales inventamos a los “supuestos”? Y nuestros alter-egos carismáticos y admirados por el mundo, se sentirán suficientes con ellos mismos, o inventarán alter-egos mejores que ellos porque no creen q el hilo de su historia sea lo suficientemente interesante. Será que entonces yo no escribo bien mi guion? Será que yo soy un alter-ego descontento y mi guionista y su bajón emocional no acaban de convencerme?

Será, q no somos más q un cruel invento de...? Será q no somos nada porque nuestra naturaleza nos fuerza a no conformarnos nunca... con lo q somos...con lo q tenemos...? Por qué valoramos entonces las ansias de superación personal y colgamos medallas a los q se reinventan?

Es esto hipocresía, o será que el gran motor que mueve la industria de nuestro particular cine se ha quedado sin imaginación?

Somos lo q realmente creemos q somos? Nos conocen? Nos conocemos? Será la esquizofrenia un intenso resquicio a una realidad perturbable q, por lo tanto, no nos conviene?

Dime, tú no te sientes sobresaturado de influencia?

I know that spitting is a bad habit, but i can't help the taste...

I know that spitting is a bad habit, but i can't help the taste...

Que yo soy de leer cosas raras, y de escribir cosas aun peores...


Tú dices... yo imagino

Seguidores