Tiene un nuevo mensaje


Me he pasado la vida entera intentando descifrarla… aunque he de reconocer que al principio me dio por negar todos y cada uno de mis sentimientos, quizá sea porque ya me duele la cabeza de por sí como para ir echándole más leña al fuego.

Siempre me atrajo la idea del diario secreto, súmmum de la inteligencia femenina que acaba convirtiéndose en un “me gusta un quién y me acuesto con un tal”.

Lo malo, que no tengo constancia ninguna.

Luego vino el boom de la tecnología, los libros quedan anticuados y pasan a su versión CD, que no es que sea más económica, pero sí más ergonómica y el polvo se acumula mucho menos. Menos espacio en las librerías, pero archivados con mucho más cuidado. Vivimos en un supuesto mundo más seguro, pero el mínimo rallajo en la chapa acaba con todos tus recuerdos.

Internet implica necesariamente comunicación, ya pasó eso de “mami, necesito a Google, no me entero del mundo y quiero hacer bien los trabajos del colegio”. El ADSL lo único que nos ha abierto ha sido las piernas… a la pornografía y a las series online.

Pero oh!, descubrimiento, a algún profesor de antropología, cansado porque sus alumnos ya no querían comunicarse con el método convencional y se jugaba el puesto de trabajo, se le ocurrió la idea de crear una gran red social que dejara a la vista de todo aquel que supiera, o pudiera teclear, todas nuestras imperfecciones.

Así creó los xats, los blogs, y las fotos hechas desde arriba enseñando un más que suculento canalillo de una niña de 15 años. También creó el Photoshop.


Y así vamos, hoy en día el raro es el q no se comunica sentado en la silla de su habitación, con un cuadrilátero cableteado delante con las cookies como única protección antigolpes.


Las personalidades se inventan, y la verdad, cuántas de ellas son más atractivas que sus alter-egos reales?

Ahora la gente se expresa en símbolos ya inventados, y las facilidades de corrección ya no son necesarias, a pesar de que hay mensajes que son indescifrables… y también hay otros que no deberían descifrarse nunca, verdad?…

Dicen los amantes de los clásicos que se ha perdido la magia de la tinta, el olor de las cartas y cientos de puestos de empleo en correos.


Pero oye, yo me pregunto, y no será mejor mandar un e-mail, y borrar aquello que sea no deseado/no seguro/o de emisor desconocido?


Así corremos menos riesgos, no? Nos perdemos acaso algo? La purga de nuestra bandeja de correo no deseado está haciendo que nos perdamos el mundo?

Baby I promise... I promise...


Cuántos, cuántos y cuantísimos de nosotros hemos escrito esa magnífica lista inventada por Hollywood, aquélla en la q nos proponemos abandonar los vicios (o eso o potenciar algunos otros, q todo en esta vida tiene cabida), numerándolos del uno al dosmildiez, avergonzándonos por no llevar una vida más diga, más estupenda, más equilibrada, menos consumista y mas políticamente correcta…

Cuántos, cuantísimos de nosotros hemos jurado antes Dios y ante la mula del Belén abandonar el tabaco, el alcohol y saludar con la mano bien abierta al Gimnasio. Decidme, cuántas cuantísimas listas se han escrito comiendo pasteles jurando una despedida y un entierro dignos?

Cuántas veces hemos prometido y hemos metido, ja!, decidme cuántos de nosotros hemos olvidado aquella lista, guardadita en el cajón de la ropa interior donde se guardan las cosas verdaderamente importantes junto con los calcetines con la puntera rota q hemos jurado no volver a ponernos, pero q guardamos, no por cariño, ni porq sean calientes, tened en cuenta q tienen agujeros y por ahí entra el aire… Pero instintivamente los guardamos, por si acaso, porq no nos gusta desprenderos del pasado eh… asiq por lo visto de ahí nacen las abuelitas q infestan la casa con figuritas de cristal q nadie sabe de dónde salen, y también por lo visto de ahí creamos Diógenes a pico y manta y luego le examos la culpa al Corte Inglés y al consumismo.

Yo he prometido dejar los vicios, abrazar al zen y a las verduras, he prometido aprender a cocinar, a no dejar los platos sucios en el fregadero pensando que papa Noel me los fregará por las mañanas, he prometido barrer más a menudo, he prometido comprar sábanas nuevas, he prometido enmarcar las fotos y ordenar apuntes.

Yo he prometido no perder mi tiempo en internet, he prometido escribir más, leer más y cotillear menos. He prometido estudiar un mes antes, me he prometido organizarme como Dios y mi Madre mandan, he prometido utilizar menos colores en los apuntes, he prometido no aprendérmelos de memoria e intentar de una vez por todas entenderlos. Me he prometido a mi misma y a mi sombra si hacía falta levantarme todos los días a las siete de la mañana, y no comprar más fotocopias.

He prometido no gritar, no encorvarme al andar, no llevar agujeros en las zapatillas ni manchas en los pantalones, he prometido no gastarme el dinero en vestidos que no me pongo ni en maquillaje q accidentalmente acaba en el suelo.

He prometido salir menos, y pensar más. He prometido abandonar bares y darles un par de respiros a mi cartera y a los camareros de los q prometí no volver a aceptar ningún otro xupito. Me he prometido menos resacas, menos vómitos, menos ligues. He prometido menos fiestas, menos madrugadas en las calles. Me he prometido a mí y mis futuros hijos menos meadas en los contenedores, menos peleas, menos caxis, menos cerveza. He prometido más sexo seguro y con más amor y conociendo su nombre, he prometido no volver a mirar por las mirillas ni a colocar vasos en las paredes para hacer del eco un nuevo idioma entendible.

He prometido llamar más a mi casa y decir menos que estudio cuando verdaderamente no lo hago, he prometido que no se me volvería a pasar la factura del móvil, que no me volverían a llamar de la facultad porq no entregué papeles a tiempo. He prometido no volver a embaucar al empollón de clase con mis armas de mujer, he prometido serme fiel a mí y a mi doctrina filosófica, he prometido no volver a entrar en una Iglesia y no volver a hacer nada que no me saliera del alma hacer.

He prometido no volver a falsificar la firma de mi madre y volver a ser una persona legal.

He prometido y me he prometido hasta ahora dosmildiez largas listas que nunca he cumplido, no por lo menos de manera constante o completa.

Me he prometido dosmildiez largas absurdeces, algunas cumplidas y unas dosmilonce olvidadas…

Me he prometido tantas cosas, q hasta ahora no me había dado cuenta que lo que estaba haciendo era lo q mas me gusta... vivir mi vida!

Feliz mi 23 cumpleaños.

Ava, te quiero.

I know that spitting is a bad habit, but i can't help the taste...

I know that spitting is a bad habit, but i can't help the taste...

Que yo soy de leer cosas raras, y de escribir cosas aun peores...


Tú dices... yo imagino

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